Marta Hernández     Nº22318 PSICOLOGA  Y PERITO FORENSE PENAL

PROCESO TERAPÉUTICO:

 

El proceso terapéutico se inicia con la demanda del paciente. Tras el primer contacto via email o telefónico, se establece la primera visita.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En este primer contacto entre paciente y psicólogo, es importante establecer el vínculo terapéutico, que favorezca la adherencia al tratamiento del paciente y minimize posibles abandonos en las fases iniciales del proceso terapéutico.

 

En la primera entrevista, se debe aclarar cúal es el motivo exacto de la demanda, si este es la conducta problema la cual requiere tratamiento o hay otros motivos que la persona no ha detectado, pero que son susceptibles de intervención.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Para determinar el diagnóstico y establecer un plan de tratamiento adecuado, primero hay que realizar una evaluación clínica. Para ello, el psicólogo se vale de la entrevista clínica, a partir de la cúal se reúne información sobre la conducta, actitudes y emociones actuales y pasadas, además de un historial detallado de la vida del paciente y del problema que presenta. Se debe determinar cuando empezó el problema específico o identificar otros sucesos como estresores, traumas o enfermedades físicas que pudieran haber tenido lugar en el mismo periodo. Además, se debe reunir información sobre el historial interpersonal y social del paciente, incluida su composición familiar y de su educación. También se recopila de manera rutinaria información sobre el desarrollo sexual, las actitudes religiosas (actuales y pasadas), los aspectos culturales relevantes y el historial educativo.

 

En la primera entrevista, también se realiza un examen del estado mental de la persona, que implica la observación sistemática de su conducta: apariencia y conducta, procesos de pensamiento, estado de ánimo y afecto, funcionamiento intelectual y conciencia. El examen mental es una forma de comenzar a descubrir como piensa y se comporta el paciente y de que manera sus acciones contribuyen a sus problemas y los explican. Pero hay casos de personas que no son lo suficientemente mayores o no tienen las destrezas necesarias para informar de sus problemas y explicarlos. En estos casos, es muy útil realizar una evaluación conductual, ya que por medio de la observación directa, se evaluan pensamientos, emociones y comportamientos de una persona en situaciones y contextos específicos, ayudando a determinar porque tiene dificultades en determinados momentos.

 

En definitiva, el objetivo de la primera visita es recabar toda la información posible sobre el problema de la persona o trastorno que padece, y determinar un diagnóstico, a partir del cual, se podrá establecer un plan de tratamiento.

 

En las siguientes sesiones, se pondrá en marcha el plan de tratamiento establecido para intervenir sobre el problema de la persona o trastorno.